Fuente: El Imparcial
La subcontratación es un tema vigente que enfrenta un dilema entre lo que se puede y lo que se debe hacer empresarialmente, respetando los derechos humanos de los trabajadores mexicanos.
A través de la historia, la creatividad, la invención y la innovación humana han llevado a encontrar nuevos horizontes de oportunidad en los negocios.
En una era de constante evolución se ha hecho necesaria la existencia de parámetros y lineamientos generadores de equilibrio.
Lo anterior debe realizarse entre el libre mercado, la formalidad y los derechos humanos fundamentales.
El esquema de subcontratación, entendida por algunos como la externalización de la mercadotecnia o tercerización, no está exenta de dicha necesidad.
¿Qué es el outsourcing?
También conocida como outsourcing, la subcontratación es el proceso económico en el que una sociedad mercantil transfiere los recursos y las responsabilidades inherentes a ciertas tareas o servicios a una empresa subcontratista ocupada de actividades especializadas.
“El outsourcing ha encontrado importantes nichos de oportunidad en varias esferas de las actividades productivas, comerciales, mercantiles e industriales”.
“Además ha ido insertándose a diversas economías tanto a nivel local como internacional”.
Sin embargo, la implementación de este sistema de servicios no puede ni debe desvincularse de la esfera del derecho.
Debe hacerlo enfrentándolo a un dilema centrado en el contraste entre lo que se puede y lo que se debe hacer desde el punto de vista empresarial.
Y por otro lado, y en la aplicación de una perspectiva de respeto a los derechos humanos de los trabajadores.